miércoles, 5 de octubre de 2011



- JUANJO: No, no y no! Lo siento, me da igual lo que diga ese ¿libro?. Yo seguiré pensando que el odio no es más que una malformación genética, fruto de la falta de empatía que sufre la humanidad. Sí, definitivamente, el odio no es más que el oído deformado de quien no se para a escuchar a los demás. No vas a convencerme de lo contrario, asi que no me vengas con esa frase estúpida de que del amor al odio sólo hay un paso porque sabes que no es verdad. Del amor al odio hay un malentendido.

- CRISTINA: Deja de ser incrédulo, todo el mundo sabe que del amor al odio hay un paso y que no se trata de escuchar sino de sufrir. Estoy harta de intentar escuchar a los demás y no escuchar nada más que excusas baratas que no hacen desaparecer el dolor. Y cuando sufres, odias. Es una secuencia lógica y así lo ha establecido Mamma naturaleza, asi que no intentes convencerme de lo contrario porque yo tengo mi propia filosofia y tu labia barata no me va a hacer pensar lo contrario de lo que yo misma he vivido.

- JUANJO: ¿Qué del amor al odio hay un paso? ¡Venga ya Cristina! No me digas que tu también piensas eso. Corrígeme si me equivoco pero, según tú, la secuencia lógica es la siguiente: AMAR – SUFRIR – ODIAR, porque del amor al odio hay un paso ¿Correcto?

- CRISTINA: Si, Juanjo, sí. Esa es mi secuencia lógica y la del resto de la humanidad.

- JUANJO: Pues lo siento pero no me convencéis. Para empezar eso es mentira porque o se ama o se odia, esos dos verbos juntos son incompatibles. Tienes que dejar de amar para llegar a odiar y un paso no es suficiente tiempo para arrancarte a nadie del pecho. En todo caso habría que plantearse si realmente se amó o si realmente se odia.

- CRISTINA: No sigas que sé por donde vas.

- JUANJO: No quieres que siga porque sabes que tengo razón. Fíjate, yo tuve 2983498 oportunidades para odiarte, una vez por cada 10 lágrimas más o menos (déjame ponerme victimoso, que es mi teoría) pero no lo conseguí ninguna de las veces, y ¿sabes por que? Porque aunque fue sólo una vez, pero te amé Cristina, te amé de verdad y eso no me dejó odiarte en ninguna de las oportunidades que me diste para hacerlo. Así que no vengas ahora a decirme que del amor al odio hay un paso porque no me lo creo, porque te juro que yo intenté odiarte y no lo conseguí. Eso sí, luego está la otra opción…

- CRISTINA: ¿Qué es….?

- JUANJO: El autoengaño. Hay quien decide autoengañarse y hacerse creer que odia a la otra persona para así intentar disminuir el sufrimiento. Opción que normalmente funciona, por lo menos a ti te fue bastante bien jeje. Pero eso no es odiar, es mentirse. Y de hecho esta conversación lo demuestra, si realmente me odiaras o me hubieras odiado alguna vez no estaríamos hablando ahora mismo. Así que aquí a 09 de julio de 2011 Juan José Gutierrez Lopez hace firme su teoría, con alguna correccion de la inicial y afirma fehacientemente, porque así queda demostrado, que del amor al odio no hay un paso, sino un autoengaño. Y que….

- CRISTINA:¿Has terminado ya?

- JUANJO: Casi. Y es que, si te parar a escuchar con un poco de atención, te das cuenta de que lo que oyes no son excusas baratas sino puntos de vista distintos, que no hacen desaparecer el dolor pero una cosa voy a decirte, y este consejo te lo regalo, por ser tu, y es que la empatía y el OIDO curan más heridas de las que pensáis tu y el resto de la humanidad.

- CRISTINA: No me has convencido.

- JUANJO: ¿No? Pues yo lo creo 100%. Y una cosa te digo, si alguna vez se demuestra lo contrario déjame seguir creyendo en mi teoría. Porque prefiero vivir pensando que en el mundo falta empatía que darme cuenta que lo que realmente falta es que la gente se quiera.

No hay comentarios: