Quiza la culpa sea de los cuentos infantiles que papa y mama nos contaban antes de dormir, o de Hollywood o incluso de esas historias epicas en las que el bueno aparecia de la nada para salvar a la pobre chica acorralada e indefensa de las garras de los malos malotes.
Si, definitivamente la culpa es de Batman, de superman y hasta de winnie de pooh! Y en definitiva, de todas aquellas anecdotas que nos enseñan a amar a los heroes, metiendonos en la cabeza esa idea de que, mas tarde o mas temprano, alguien vendria a ayudarnos o que, simplemente, todo se arreglaria solo, siendo lo unico indispensable poder atiborrarse de miel en un rincon.
Y es que todos hemos soñado con que nos rescaten, quiza por eso todos vemos las peliculas de superheroes con una sonrisa en los labios encaramados al conjin del sofa.
Aunque quiza la culpa sea del teatro de la vida, que escasea de presupuesto para actores de reparto. Nadie nos dijo, mientras veiamos esas historias de niños que a veces, la victima y el heroe son la misma persona. que tenemos que salvarnos nosotros mismos y que superman, cogió la baja por depresion
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